Procuraduría cita a Ecopetrol, MinaAmbiente y a la Anla ante crisis ambiental que genera derrame de
- J. Andrés Neira
- 25 mar 2018
- 2 Min. de lectura
Ecopetrol, Ministerio de Medio Ambiente y Anla (Autoridad Nacional de Licencias Ambientales) fueron citados por la Procuraduría General de la Nación ante la crisis ambiental que generó el derrame de petróleo en el pozo La Lizama 158, ubicado en el corregimiento La Fortuna, en Barrancabermeja (Santander), así dio a conocer ayer el boletín 158 de la Procuraduría.
Ante la creciente emergencia, le fue solicitado a Claudia V. González, Directora de la Anla, “ordenar a la petrolera suspender las actividades de exploración y explotación en el área, iniciar en la zona acciones para atender el incidente que ha afectado gravemente la fauna y la flora, y realizar estudios que determinen la razón técnica y científ
ica de la emanación de crudo”, requirió el ente de control.
Al Presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón Pardo, le fueron requeridos dos informes: uno detallando “las medidas preventivas iniciadas por Ecopetrol para detener los afloramientos de hidrocarburos en la zona de La Lizama y sus alrededores”. Y otro, “para establecer si las medidas para atender la emergencia estaban contenidas en el Plan de Contingencia presentado por Ecopetrol y si han sido suficientes para mitigar y prevenir el impacto ambiental causado por la emanación del crudo”, indica el comunicado.
El llamado de la Procuraduría también busca recopilar un compendio de las afecciones de salud que sufren los habitantes de comunidades aledañas, los impactos ambientales al paisaje, suelos, recursos hídricos y de aire que se han reconocido en medio de la emergencia, pero también de las labores que se han realizado para rescatar la fauna silvestre.
En los próximos días una comisión de la Procuraduría viajará hasta la región, para constatar el progreso de las medidas previstas para superar la crisis ambiental.
Después de 22 días de emergencia ambiental, al menos 22 mil barriles de crudo han sido derramados y ya son 15 kilómetros los que se ha extendido, afectando la salud de comunidades de la región, fauna, las quebradas La Lizama y Caño Muerto, pero también parte del río Sogamoso.
Hozzászólások